miércoles, 17 de diciembre de 2008

Quiero ver tu risa todo el díaescuchar la melodía de tu vozquisiera ser el brillo de tus ojosel peine que desnuda tu esplendorla esquina que te ve cuando caminasQuiero ver tu risa todo el díaescuchar la melodía de tu vozquisiera ser el brillo de tus ojosel peine que desnuda tu esplendorla esquina que te ve cuando caminasLa forma de tus labiosy quiero ser tu ultimo dolorte pido que me cures esta heridayo se muy bien que no es tu obligacióntan solo si amortiguas mi caídaseras mi salvaciónPrometo intentar no hacerte dañoprometo darte todo lo que yoprometo regalarte sin reparo mi corazónprometo intentar no hacerte dañoprometo darte todo lo que yoprometo regalarte sin reparo mi corazón

martes, 2 de diciembre de 2008

Sonrisa de Samoyedo

El Samoyedo toma su nombre de un pueblo en Rusia que después de la revolucion rusa cambió su nombre por “Nenets”. Distintos exploradores del Ártico (por ejemplo Fridtjof Nansen y Roald Amundsen) llevaron distintos ejemplares a Europa y mantuvieron el nombre de “Samoyedos” para establecer criaderos tanto en Europa como en Estados Unidos.
Fridtjof Nansen creía que el uso de perros de arrastre era la única manera efectiva de explorar el norte y utilizó Samoyedos en sus expediciones polares. Desafortunadamente, su plan fue desastroso para los animales, planeando alimentar a los perros más fuertes con los perros más débiles a medida que se fueran muriendo durante la expedición. Al final, perdió a casi todos los perros.
Roald Amundsen usó un grupo de perros liderado por un Samoyedo de nombre Etah en la primera expedición que alcanzó el Polo Sur.
Análisis recientes de ADN de esta raza lo llevaron a ser incluido dentro de las catorce razas de perros más antiguas, junto con el Husky siberiano, Alaskan Malamute, el Chow Chow y otras 10 razas. El Samoyedo ha sido criado y entrenado durante los últimos 3.000 años.